Tornado dentro de una botella

¡Bienvenidos, pequeños científicos! Hoy vamos a descubrir cómo hacer un tornado dentro de una botella con materiales que seguro tienes en casa. Este experimento es muy fácil y te ayudará a entender cómo se forman los tornados en la naturaleza. ¿Estás listo para crear tu propio mini tornado?

  • 2 botellas de plástico vacías (de 1 litro o 1.5 litros).
  • Agua del grifo.
  • Jabón líquido o lavavajillas.
  • Colorante alimentario (opcional, pero hace que se vea más divertido).
  • Cinta adhesiva fuerte o un conector de botellas.
  • Una arandela o junta de goma (opcional, pero ayuda a mejorar el giro del agua).
  1. Preparar las botellas. Llena una de las botellas hasta un poco más de la mitad con agua. Agrega unas gotas de colorante alimentario para hacer que el tornado sea más visible. Pon unas gotas de jabón líquido para darle un efecto de remolino más claro
  2. Unir las botellas. Coloca la arandela sobre la boca de la botella con agua (esto ayuda a controlar el flujo del agua). Toma la otra botella vacía y colócala boca abajo sobre la que tiene agua. Usa cinta adhesiva fuerte para unir bien las botellas y evitar fugas de agua. Si tienes un conector de botellas, simplemente atorníllalo.
  3. Crear el tornado. Voltea las botellas rápidamente para que la botella con agua quede arriba. Gira la botella de arriba en círculos pequeños durante unos segundos. Observa cómo se forma un tornado en miniatura mientras el agua baja a la botella de abajo en forma de espiral.

Este experimento nos ayuda a entender los tornados porque el agua gira formando un vórtice, que es lo mismo que pasa en la atmósfera cuando se forma un tornado real. El agua gira porque la fuerza centrífuga empuja el líquido hacia afuera mientras que la gravedad lo hala hacia abajo. Esto crea la forma de embudo que caracteriza a los tornados.

Imagina que estás girando en un carrusel. Cuando el carrusel gira rápido, sientes que te empuja hacia afuera, ¡eso es la fuerza centrífuga! Lo mismo pasa con el agua en la botella: cuando la giras, el agua también quiere ir hacia afuera, pero como está atrapada en la botella, forma un remolino que baja en espiral. ¡Eso es un tornado en acción!

  • Los tornados pueden girar a velocidades de hasta 500 km/h.
  • Se forman cuando el aire caliente y húmedo choca con aire frío y seco.
  • En los Estados Unidos existe un lugar llamado «Callejón de los tornados», donde ocurren muchos tornados cada año.
  • Los tornados pueden ser pequeños, de unos metros de ancho, o gigantes, de más de 1 km de diámetro.

Si quieres hacer este experimento aún más divertido, prueba estas ideas:

Agrega purpurina: Así verás mejor el giro del agua.

Usa diferentes colores de agua en varios intentos.

Prueba con botellas más pequeñas o más grandes y observa si el tornado cambia de tamaño.

Este experimento es una manera fácil y divertida de aprender sobre la ciencia del viento y el movimiento del agua. Además, nos ayuda a entender mejor cómo se forman los tornados en la naturaleza. ¡Sigue experimentando y divirtiéndote con la ciencia!

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